Hay ciudades en las que el cine se detiene más habitualmente que en otras. Si tuviésemos que nombrar alguna, seguro se nos viene a la cabeza Nueva York, Londres o París. Pero, ¿cuáles son las ciudades de película que más vemos en la gran pantalla?
Por goleada, ganan las ciudades estadounidenses. Nueva York, Chicago, San Francisco o Los Ángeles son las más habituales en las películas de todos los tiempos. Recordemos por ejemplo a Nueva York en la mítica Desayuno con Diamantes, las películas que surgieron de la serie Sexo en Nueva York, Cazafantasmas, King Kong, etc. La costa Oeste también está presente con Los Ángeles y San Francisco en películas como La La Land, Pretty Woman, Noviembre Dulce y Señora Doubtfire, entre otras. Y otras como Las Vegas, que tienen películas enteras dedicadas a ellas como Resacón en Las Vegas, Leaving Las Vegas o Algo pasa en Las Vegas.
Pasando al otro lado del charco, nos vamos hasta Londres, escenario de cintas como Notting Hill, Love Actually, El diario de Bridget Jones o la saga de Harry Potter. Otra ciudad europea bastante popular es Roma, donde han tenido lugar películas como Come, Reza, Ama, Vacaciones en Roma o Ángeles y Demonios. En París también nos hemos encontrado a personajes como Amèlie o a Owen Wilson paseando en Midnight en París.
Berlín, Ámsterdam y Hong Kong son menos habituales, pero también tienen su espacio en el cine. Ámsterdam, por ejemplo, acogió el rodaje de Bajo la misma estrella, El otro guardaespaldas o Deuce Bigalow, European Gigoló.
Todos ellos son destinos de película que pueden conocerse viajando y desde el cine. ¿Quién no ha soñado nunca con pararse frente a Tiffany’s como Audrey Hepburn o en entrar en una librería de viajes como la de Notting Hill? Viendo estas películas, seguro que las ganas de viajar se hacen mayores.
